En esa temporada, el portugués construyó un equipo que era casi letal al contragolpe y muchos de los partidos los ganó por goleadas. El entrenador portugués repartió los minutos entre los dos. De este modo el Córdoba CF se quedó a dos puntos de entrar en la zona de ascenso. En aquel entonces, el team estaba dirigido por José Mourinho, y se coronó campeón con 100 puntos en la tabla y 121 goles a favor, aunque el Barcelona igualó el récord de los 100 puntos la temporada siguiente.
